Para evitar el deterioro cognitivo, es muy importante estimular nuestro cerebro diariamente, ya sea leyendo o practicando juegos mentales que nos ayudan a ejercitarlo. Y dejar los hábitos que matan neuronas.
Los trastornos que afectan la salud del cerebro a menudo son causados por factores hereditarios, edad o lesiones. Sin embargo, se ha demostrado que existen hábitos particulares que pueden ser el origen, porque matan neuronas y reducen su actividad.
La salud cognitiva disminuye con los años, por lo que a edades muy avanzadas se pierde la memoria y se hace más difícil realizar las tareas habituales que anteriormente eran muy simples. Sin embargo, hay personas que tienen estos problemas a una edad temprana, debido al deterioro que sufren gracias a la práctica regular de ciertas actividades.
Malos hábitos que matan neuronas
Aunque en casi todos los casos los efectos no ocurren de inmediato, todos debemos ser conscientes de que a la larga estas actividades generan daños irreversibles. Dado que es importante mantener una buena función neuronal para tener un cerebro sano, compartiremos contigo los 9 hábitos poco saludables que matan neuronas y afectan u salud cerebral.
1. Situaciones estresantes
Una persona que está sujeta a situaciones de estrés regular tiende a tener más dificultades para concentrarse y usar sus habilidades cognitivas. De hecho, como respuesta ante el estrés en el cuerpo se matan neuronas y, en algunos casos, el estrés impide la formación de nuevas neuronas en el hipocampo.
2. No tener un buen desayuno
El desayuno juega un papel fundamental en el metabolismo y el peso corporal. Sin embargo, también es necesario activar el cerebro en las primeras horas de la mañana.
La falta de proteínas, vitaminas y nutrientes en el desayuno causa degeneración cerebral, lo que conduce a la muerte de las neuronas debido a la sobrecarga durante las actividades del día.
3. Poco sueño
Una de las consecuencias más graves de la falta de sueño está relacionada con el daño cognitivo. Esto provoca la pérdida de células cerebrales y produce efectos nocivos a corto, mediano y largo plazo.
Por ejemplo, después de una noche de poco sueño, es más difícil concentrarse y realizar tareas que requieren esfuerzo mental. Más tarde, esto puede conducir a un mayor deterioro, y pueden ocurrir algunos trastornos degenerativos como la demencia.
4. No practicar actividad física
La vida sedentaria es un mal hábito que causa problemas en el cerebro. La inactividad del cuerpo disminuye la secreción de varias sustancias químicas importantes y da como resultado la pérdida de habilidades.
Por otro lado, se ha demostrado que practicar deportes puede cambiar la estructura y la función del cerebro, lo que influye en la salud.
5. Ambientes contaminados
Los entornos con altos niveles de contaminación afectan a las personas que están expuestas a ella directamente, y matan neuronas. El cerebro es el órgano que consume más oxígeno y en este tipo de ambiente, la cantidad que recibe es limitada.
6. Fumar
Las toxinas en el tabaco tienen un impacto negativo en los pulmones y atacan significativamente las funciones cognitivas. Los consumidores directos, como los fumadores pasivos, tienen más probabilidades de sufrir pérdida de memoria y Alzheimer cuando llegan a ser personas mayores.
7. Comer en exceso
La ingestión de platos en cantidades exageradas provoca la desaceleración de la circulación sanguínea y limita el transporte de oxígeno al cerebro. Si consumes alimentos ricos en grasas saturadas, debes saber que tus niveles de colesterol aumentarán y causarán inflamación en los principales tejidos del cuerpo.
El hecho de no moderar tus porciones altera la función nerviosa y la memoria inmediata.
8. Forzar la actividad cerebral cuando estás enfermo
Muchas afecciones causan un tipo de debilidad física, incluida una alteración de la función cerebral. Trabajar, estudiar o hacer una actividad cognitiva cuando estás enfermo puede ser muy dañino para los humanos.
Este hábito disminuye la eficiencia del cerebro y se matan neuronas.
9. Falta de estimulación
Hay muchas actividades que estimulan cada función cerebral y las mantienen en perfecto estado, a pesar del paso del tiempo. Leer un libro, practicar juegos mentales o cualquier otra actividad que implique pensar es una forma de ejercitar este órgano para que no desarrolle patologías graves.
Cuando buscamos una solución a estas prácticas negativas, obtenemos un impacto positivo en este aspecto de la salud.